Los Guardianes de Cleveland, con la espalda contra la pared, buscaban extender la batalla en la Serie de Campeonato de la Liga Americana. Sin embargo, los Yanquis de Nueva York tenían otros planes.
El encuentro se caracterizó por la adrenalina y la incertidumbre. Los bates de ambos equipos resonaron en el parque, dejando claro que la victoria sería una batalla campal. En el bando neoyorquino, Giancarlo Stanton se robó el show con un jonrón de tres carreras, mientras que Juan Soto, con un cuadrangular de dos carreras, aportó al ataque.
La tensión se intensificó en la novena entrada. Los Guardianes, con dos corredores en base, amenazaban con remontar el marcador. Sin embargo, el mánager de los Yanquis, Aaron Boone, confió en Tommy Kahnle para cerrar el juego. El lanzador derecho, con un par de pitcheos magistrales, logró sofocar la rebelión de Cleveland, asegurando la victoria para los Yanquis.
La victoria del viernes deja a los Guardianes al borde de la eliminación, con un 3-1 en contra en la serie. La presión se multiplica para Cleveland, que tendrá que ganar los tres juegos restantes para avanzar a la Serie Mundial.