Sin embargo, la atención se centró en la lesión de Aidan O'Connell, el quarterback de los Raiders, en el primer cuarto.
O'Connell, quien había sido elegido como el mariscal de campo titular para este partido, sufrió una lesión en el pulgar de su mano derecha al intentar lanzar un pase largo. El impacto de su mano con la del safety de los Rams, Kam Curl, provocó un dolor inmediato que le impidió continuar con el juego.
"Fue muy desafortunado", declaró O'Connell después del encuentro. "Tenía muchas ganas de jugar hoy y de aprovechar esta oportunidad, por lo que ser truncado de esa manera fue definitivamente difícil". A pesar del dolor, O'Connell intentó completar una jugada en tercera y 21, pero su pulgar ya estaba entumecido.
Tras el partido, O'Connell tenía el pulgar inmovilizado con una férula cubierta de cinta negra. Aunque aún se desconocen los detalles de la lesión, O'Connell espera que la situación no sea grave, "pero (estaba) esperando buenas noticias", mencionó, recordando una lesión similar que sufrió en la secundaria.Gardner Minshew, quien había sido el quarterback titular de los Raiders al inicio de la temporada, entró a cubrir la posición de O'Connell. Desafortunadamente, la situación no mejoró para los Raiders, ya que Minshew tuvo un desempeño irregular con tres intercepciones y un balón suelto que fue devuelto para touchdown por los Rams.