, receptor abierto y agente libre, enfrentará una suspensión de seis partidos tras dar positivo en una prueba antidoping por sustancias que mejoran el rendimiento. La liga confirmó el castigo, que lo mantendrá fuera de las canchas hasta la Semana 12 de la temporada.
En un giro que pocos esperaban, Beckham rompió el silencio durante su participación en el podcast Pivot, donde aseguró: "Nunca, de manera consciente, consumí sustancias prohibidas". Sin embargo, el reglamento es claro y la sanción, inapelable. El veterano de 32 años, quien la pasada temporada vistió la camiseta de los Dolphins de Miami, apenas registró nueve recepciones para 55 yardas, números que marcaron su peor desempeño en una década como profesional.
La trayectoria de Beckham contrasta con este momento crítico:
- Selección de primera ronda en el draft de 2014.
- Cuatro temporadas con más de 1,000 yardas recibidas en sus primeros cinco años con los Giants de Nueva York.
- Traspasos emblemáticos a los Browns de Cleveland (2019) y luego a los Rams de Los Ángeles (2021).
Con 7,987 yardas recibidas a lo largo de su carrera, Beckham ocupa el puesto 119 en la historia de la NFL. Ahora, el reloj comienza a correr para su regreso, mientras la sombra de la suspensión redefine su futuro en la liga.
