Cowboys: 57M$ en espacio salarial, ¿una estrategia conservadora?
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René CardenasEste cambio se reflejó en la salida de Mike McCarthy y la llegada de Brian Schottenheimer como nuevo entrenador en jefe. Pero la incertidumbre no se limita a la dirección técnica.
La reestructuración contractual se ha convertido en el foco de atención. Dak Prescott, quarterback estrella del equipo, vio su contrato de cuatro años reestructurado, generando un espacio salarial de casi 37 millones de dólares. Esta jugada, un acuerdo histórico en la liga con un promedio anual de 60 millones de dólares, se suma a la reestructuración del contrato de CeeDee Lamb, generando otros 20 millones de espacio salarial. Ambos acuerdos, firmados el año pasado, reafirman el compromiso a largo plazo con estos jugadores clave.
Sin embargo, la pregunta que flota en el aire es: ¿cómo usará Dallas este espacio de casi 57 millones de dólares? El propietario y gerente general, Jerry Jones, se mostró cauto en sus declaraciones tras la ceremonia de retiro de Zack Martin, siete veces All-Pro: “No creo que ‘agresivo’ sea la palabra correcta… No estoy viendo la agencia libre como un lugar para llenar un hueco”. Esto sugiere una estrategia más conservadora de lo que muchos esperan.
El siguiente en la lista para una considerable renovación contractual es Micah Parsons. Las conversaciones preliminares ya han comenzado para este astro defensivo, quien se encuentra en el último año de su contrato de novato. Su posible nuevo contrato podría convertirlo en el jugador defensivo mejor pagado de la NFL, superando incluso el salario anual promedio de 35.5 millones de dólares de Maxx Crosby en Las Vegas.
La situación de Parsons contrasta con la de Lamb, quien el año pasado se ausentó de las actividades del receso y la pretemporada esperando su nueva extensión. “El objetivo era hacer lo de CeeDee temprano”, declaró Stephen Jones, vicepresidente ejecutivo de personal, “Ese siempre es el objetivo, hacerlo cuando puedes”.
Mientras tanto, los Cowboys han realizado otros movimientos: una extensión de contrato por 80 millones de dólares para el tackle defensivo Osa Odighizuwa, asegurando un ancla en la línea defensiva interior; y la renovación de C.J. Goodwin con un contrato de un año, junto con la retención de agentes libres exclusivos, incluyendo a Brock Hoffman, el posible sustituto de Martin.
La agencia libre está a la vuelta de la esquina, y la estrategia de Dallas, aún en un mar de especulación, se revela poco a poco, dejando entrever un futuro lleno de posibles cambios, pero lejos de las apuestas arriesgadas.
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