Bruce, el Golden Retriever estrella de los Nacionales

Pero esta tarde tenía un ingrediente especial, un invitado inesperado que estaba a punto de robarse el show: Bruce, un Golden Retriever de 21 meses, no era un aficionado cualquiera. Su historia, ligada a los Rochester Red Wings, el equipo Triple-A de los Nacionales, estaba a punto de tener un capítulo memorable.
Llegó a Washington tras un viaje nocturno con su dueño, Josh Snyder, quien lucía orgulloso una camiseta de los Nacionales con el número 25 y el nombre "Bruce" en la espalda. "Mira a este perro e intenta no sonreír. Es genial. Es divertido," comentó Josh, describiendo a su compañero canino.
Antes del gran momento, Bruce disfrutó de una sesión de fotos improvisada, rodeado de fanáticos emocionados. Pasó cerca de 50 minutos en el campo, incluso practicando la recolección de bates con la ayuda de Snyder. Incluso Riley Adams, el receptor de los Nacionales, se tomó un momento para acariciarlo.
El momento cumbre llegó durante una promoción de "Pups in the Park". Con un pañuelo y un parche de “debut en la MLB”, Bruce, fiel a su entrenamiento de las últimas dos temporadas con los Red Wings, recogió un bate que había sido dejado caer por el relevista Zach Brzykcy. La multitud estalló en aplausos ante la hazaña del peludo.
Bruce recibió un bate conmemorativo, y luego, con un andar digno de una estrella, recorrió una ruta serpenteante desde el dugout hasta la primera base. Su actuación fue impecable, y no solo eso. Además de ser una sensación en el estadio, su historia ya había creado un gran revuelo en redes sociales. “Las redes sociales… todo eso parece que realmente ha explotado, y nos encanta. Muy buena publicidad con nuestro objetivo y nuestra misión de unir a las personas. Muestra que está logrando justo eso,” explicó Snyder.
La jornada terminó. Bruce, luego de su memorable debut, regresaría a sus funciones en Triple-A. Su historia, sin embargo, continúa. No solo es una historia de un perro talentoso, sino también una muestra del poder de la conexión entre personas y animales, y de cómo una buena acción puede generar un impacto positivo en la comunidad. Además, es importante destacar que tanto Bruce como su predecesor, Milo, participaron en campañas para recaudar fondos para el Centro de Alcance para Veteranos de Rochester y Honor Flight de Rochester.
Su trabajo en el campo, esa tarde de sábado, fue mucho más que un simple acto de recoger un bate; fue una demostración de lealtad, entrenamiento y el espíritu incansable de un perro Golden Retriever excepcional.