PSG humilla 4-0 al Real Madrid en demoledora exhibición en el MetLife

Apenas iniciado el partido, el Paris Saint-Germain dejó claro sus intenciones con un ritmo demoledor que desnudó todas las carencias defensivas del Real Madrid. "Fue una exhibición de cómo queremos jugar: intensidad, presión alta y eficacia", declaró posteriormente Luis Enrique, técnico del PSG.
Los números hablan por sí solos:
La defensa merengue, reorganizada por las bajas de Huijsen (suspendido) y Alexander-Arnold (lesionado), cometió errores infantiles que fueron capitalizados con frialdad por los franceses. Particularmente doloroso fue el primer tanto, donde Raúl Asensio perdió el balón en propia área ante la presión de Dembélé, generando la jugada que Ruiz terminaría rematando a puerta vacía.
El Madrid de Xabi Alonso intentó reaccionar con su tridente ofensivo (Mbappé, Vinicius y Gonzalo García), pero chocó contra un muro defensivo perfectamente organizado. Thibaut Courtois, pese a sus múltiples atajadas, no pudo evitar el descalabro.
El partido tuvo momentos simbólicos más allá del marcador: la despedida de Luka Modric con la camiseta madridista en torneos internacionales y el regreso de Carvajal y Militão tras largas lesiones. Pero la noche perteneció sin discusión al PSG, que ahora mira hacia la gran final contra el Chelsea con la oportunidad de coronar una temporada histórica.
El MetLife, con 77,542 espectadores en su mayoría madridistas, fue testigo de cómo el campeón europeo dio una lección de fútbol moderno: presión alta, transiciones rápidas y una eficacia letal. Una demostración que deja serias dudas sobre el proyecto de reconstrucción que lidera Xabi Alonso en el club español.