Padres aplastan 11-1 a Gigantes con exhibición ofensiva y pitcheo de Pivetta

Pero lo que parecía un duelo ajustado se convirtió en una exhibición de poder que terminó con cifras contundentes: 11-1.

Nick Pivetta, el abridor de San Diego, fue una muralla. "Sentí el control desde el calentamiento. Sabía que podía dominarlos si mantenía mi enfoque", comentaría después de lanzar 6.2 entradas con solo una carrera permitida. Su actuación dejó en evidencia la sequía ofensiva de San Francisco, que acumula apenas 5 carreras en sus últimos cinco juegos.

El parteaguas llegó en la segunda entrada. Con Kai-Wei Teng en problemas de control, los Padres desataron un aluvión:

• Doblete de dos carreras de Jake Cronenworth
• Batazo al jardín izquierdo de Fernando Tatis Jr. que trajo dos más
• Tres bases por bolas consecutivas que terminaron por hundir a los Gigantes

Ramón Laureano, el dominicano adquirido en la fecha límite de cambios, remató la faena con un cuadrangular de dos carreras en la quinta entrada. Su bate promedio .287 desde que llegó a San Diego confirma que fue un movimiento acertado.

Mientras los Padres celebran su quinta victoria seguida y el liderato en la División Oeste, los Gigantes enfrentan preguntas difíciles. Su pitcheo ha permitido 32 carreras en esta serie, y la ofensiva no encuentra respuestas. El manager Gabe Kapler admitió en conferencia de prensa que "necesitamos reevaluar varios aspectos técnicos y anímicos".

Los números fríos no mienten: los dominicanos Tatis Jr. y Laureano combinaron 5 hits, 5 carreras impulsadas y 4 anotadas. Del otro lado, solo Rafael Devers logró conectar más de un hit para los Gigantes, cuyo clubhouse cerró sus puertas a la prensa por 40 minutos después del juego.

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