Marsella humilla al PSG en un clásico francés lleno de errores y polémica

Apenas cinco minutos bastaron para que la historia del partido tomara un rumbo inesperado.
"Sabíamos que teníamos que ser agresivos desde el inicio. No podíamos dejarles respirar", comentaría después un jugador marsellés bajo condición de anonimato. La advertencia se materializó cuando Nayef Aguerd capitalizó un error infantil de Chevalier, dejando en evidencia las grietas en el PSG que muchos creían superadas.
La expulsión de De Zerbi en el banquillo marsellés añadió dramatismo a los minutos finales, pero ni siquiera eso alteró la concentración de unos jugadores que parecían decididos a romper con 12 años de maldición. En el vestuario, las celebraciones mezclaban alivio con satisfacción: "Esto demuestra que cuando trabajas con convicción, los resultados llegan", se escuchaba entre los jugadores.
Mientras el PSG veía cómo su viaje a la ceremonia del Balón de Oro se empañaba con este tropiezo, Marsella sumaba su tercera victoria consecutiva como local. Los números hablan por sí solos: primera portería imbatida en casa desde diciembre pasado y primer gol contra el PSG en seis encuentros. Un parteaguas que podría marcar el inicio de una nueva era en esta rivalidad histórica.