Rams remontan con pase de 88 yardas en los últimos minutos ante Colts
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Los números no mienten: Stafford terminó la noche con 375 yardas y tres touchdowns, pero el verdadero dolor de cabeza para Indianápolis vino de sus propios errores. "Fue una jugada que duele, pero tenemos que aprender de esto", admitió después del partido el receptor Adonai Mitchell, quien perdió el balón justo al borde de la zona de anotación en lo que hubiera sido un espectacular touchdown de 76 yardas.
El tercer cuarto dejó claras las oportunidades desperdiciadas:
Lo que comenzó como dominio local terminó siendo un recordatorio cruel: en la NFL, ningún partido está ganado hasta que suena el silbato final. Los aficionados de Indianápolis aún se preguntan cómo ese pase de 88 yardas se les escapó entre las manos.