Dirigir es mi libertad: Diego Luna

El camino que Diego Luna ha forjado en el cine le permite ahora vivir de la actuación y encontrar su momento de libertad en la dirección, donde puede ejecutar las historias que trae en la cabeza sin reservas, como sucedió con Mr

Dirigir es mi libertad: Diego Luna
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Cd. de Mexico.

El camino que Diego Luna ha forjado en el cine le permite ahora vivir de la actuación y encontrar su momento de libertad en la dirección, donde puede ejecutar las historias que trae en la cabeza sin reservas, como sucedió con Mr. Pig.
Cada vez siento más libertad. Tengo la ventaja de decir que yo vivo de actuar, no de dirigir, por eso cuando dirijo tengo una libertad inusual, porque no me estoy jugando nada; libertad que no siento cuando actúo, porque ahí hay una responsabilidad más grande”, destacó Luna.
Me siento muy afortunado de que todo lo que he hecho me tiene hoy aquí con la libertad de hacer las historias que quiero hacer; aunque, siendo sincero, creo que en el caso del cine las puertas las abre un guión.
Es cierto que hay guiones que lees más rápido que otros, pero eventualmente es la historia la que entusiasma a la gente o el dinero, y yo por suerte no tengo dinero”, declaró en entrevista.
Mr. Pig, película escrita y dirigida por él, llegará a los cines hoy. La historia se centra en un granjero estadounidense que viaja a México en busca de un mejor hogar para el último cerdo que le queda; su hija, con quien no mantiene una relación cercana, lo alcanza en el viaje y lo acompaña pese a los resentimientos de la infancia.
El interés de fondo era muy simple: hacer una película entre padres e hijos en una etapa madura donde es el hijo quien se acerca, quien está entendiendo y asimilando la despedida”, explicó Diego.
El protagonista es Danny Glover, quien aceptó colaborar con el mexicano porque le ofreció un guión donde no cabían las etiquetas.
 Él vive en una industria que encasilla muy fácilmente, me dijo que lo leyó y no encontró a un afroamericano; yo le dije: no escribí a un afroamericano, escribí a un granjero. Si lo haces tú será afroamericano, si lo hiciera yo sería mexicano. Pero yo escribí a un ser humano, sin poner etiquetas”, compartió el director.
La cinta se realizó en México, de norte a sur, filmando todo lo que se encontraba a su paso, por lo que Luna asegura que si se ve un México digno y sin violencia es porque también existe esa cara y él no disfrazó ninguna escena.
Si hubiera habido un retén, habría filmado el retén, si me hubiese encontrado con algo gravísimo que no nos dejara cruzar, también lo habría filmado, pero México también es esto. No estoy negando la violencia, pero hay muchos Méxicos; y yo salí a filmar el que me tocó ver, con eso quería ser muy claro; tenemos la historia y a los personajes, pero ahora los vamos a confrontar con un contexto y una realidad, vamos a dejar que afecte el destino final de la película”, dijo.
El resultado de dejar que la película fluyera en el viaje del desierto a la playa le dejó al equipo una serie de anécdotas que los sorprendieron.
Por ejemplo, hay una escena donde se están comiendo una gordita de moronga con la camioneta parada en pleno diluvio, esa escena no estaba escrita así; nos tocó y se volvió una imagen muy hermosa”, dijo Diego.

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