La policía británica interrogaba el martes a un sospechoso de 17 años, tratando de determinar qué lo llevó a perpetrar un violento ataque en una clase de danza y yoga centrada en Taylor Swift, que resultó en la muerte de tres niños y dejó once personas heridas, entre ellas nueve niños y dos adultos. El brutal ataque tuvo lugar en Southport, un balneario costero en el noroeste de Inglaterra, conocido por su playa y su muelle, apodado como “soleado Southport”. La tragedia se desarrolló durante una clase de danza y yoga para niños de entre 6 y 11 años, poco antes del mediodía del lunes.
El joven atacante irrumpió en la clase, armado con un cuchillo, y comenzó a agredir a los presentes. Dos niños murieron en el lugar, y la policía confirmó la muerte de un tercer niño el martes. Cinco de los heridos, entre ellos dos adultos que intentaron proteger a los niños, se encuentran en estado crítico en hospitales locales. Vecinos de la zona han rendido homenaje a las víctimas dejando flores y animales de peluche en el perímetro policial que rodea la calle con casas de ladrillo donde ocurrió el ataque. Los testigos describieron escenas de horror, con niños ensangrentados huyendo del establecimiento.
Estoy completamente en shock y aún asimilando el espanto de este suceso. Sólo eran niños pequeños en una clase de baile, escribió en Instagram.Taylor Swift, cuyo nombre fue utilizado como temática para la clase, expresó su conmoción en redes sociales. El sospechoso, nacido en Cardiff, Gales, y residente en un poblado cercano a Southport desde hace unos años, fue detenido bajo sospecha de asesinato e intento de asesinato. Hasta el momento, no se han presentado cargos formales y la policía no considera el ataque relacionado con el terrorismo ni busca a otros sospechosos.
Serena Kennedy, jefa de la policía de Merseyside, elogió la valentía de los adultos que resultaron heridos tratando de proteger a los niños. "Creemos que los adultos que resultaron heridos intentaron valientemente proteger a los niños que estaban siendo atacados", afirmó.