La noticia, publicada en un perfil del New York Times, ha generado revuelo entre sus fanáticos, quienes la consideran una leyenda viva del cine y la televisión.
La decisión de Bates, quien ha dedicado 50 años a la actuación, no es un capricho. La actriz, conocida por su intensidad y entrega a cada uno de sus papeles, ha reconocido que el desgaste emocional de la profesión la ha llevado a un punto de quiebre. "A veces me da envidia tener este talento, porque no puedo contenerlo y lo único que quiero es mi vida", confesó la actriz.
Bates ha experimentado momentos difíciles durante su trayectoria. En una ocasión, durante el rodaje de una producción que no mencionó, la actriz llegó a considerar abandonar la actuación. Sin embargo, después de un momento de reflexión, decidió continuar.
El destino, como suele hacerlo, le tendió una mano. La actriz recibió el guion de Matlock, una serie que la cautivó por completo. La trama gira en torno a Madeline "Matty" Matlock, una mujer que, tras alcanzar el éxito en su juventud, decide volver a la cima en el mundo del derecho.
Bates se identificó con la lucha y la determinación de Matty, y en el guion encontró una oportunidad de desahogarse y plasmar su propia experiencia. "Todo por lo que he rezado, por lo que he trabajado, por lo que he luchado, de repente me piden que lo use todo", señaló Bates. "Es agotador".
Matlock se convierte en el proyecto final de Bates, un cierre a una carrera llena de logros y momentos inolvidables. A pesar del anuncio, es difícil imaginar que la actriz abandone por completo la industria que la vio crecer.
Las historias de quienes forjan su camino en el mundo del espectáculo son como las páginas de un libro: llenas de aventuras, obstáculos y momentos que marcan un antes y un después. La historia de Kathy Bates aún tiene mucho que contar, y aunque se despida de los escenarios, su legado perdurará en la memoria de quienes han sido cautivados por su talento.