¿Te has preguntado alguna vez qué impulsa a su personaje, el detective Vincent Hanna, a ser tan apasionado y un tanto impredecible?
Al Pacino ha revelado un secreto que cambia la perspectiva de la película: Hanna era adicto a la cocaína. En su nuevo libro de memorias, Sonny Boy, Pacino cuenta cómo inicialmente se filmó una escena en la que Hanna consume cocaína en un club, pero fue eliminada del montaje final.
"Hanna tenía problemas como ser humano, problemas en su vida. Era volátil, nervioso y propenso a volverse loco", escribió Pacino. "También estaba consumiendo cocaína, y en cierto modo basé todo mi personaje en eso".
El actor confiesa que la escena eliminada "explicaba mucho del comportamiento de mi personaje, y sin esa explicación, puedo ver cómo algunos aspectos de mi actuación parecían extravagantes".
"Si la audiencia hubiera visto un momento o dos en los que Hanna consumía cocaína, creo que habrían estado mejor preparados para ver lo que hice", agregó.
Sin embargo, Pacino también reconoce que la intensidad de Hanna, su pasión por su trabajo y su forma de lidiar con las cosas, le permitieron "aplicar ese tipo de energía" en su actuación. "Era casi una técnica que utilizaba como detective, y funcionaba para él".
La revelación de Pacino sobre la escena eliminada añade una nueva capa de profundidad a su interpretación en Heat, y nos invita a replantear las motivaciones de Hanna y la intensidad de su actuación.