El director Chad Stahelski, en una reciente entrevista, reveló que a menos de un día del inicio del rodaje, la producción se encontraba al borde del colapso financiero. Con un déficit de 6 millones de dólares, la película se encontraba en riesgo de ser cancelada. Keanu Reeves, el director y el productor habían invertido sus propios recursos, pero no era suficiente para salvar el proyecto.
Fue entonces cuando la poderosa agencia de talentos CAA, encargada del esquema de financiamiento, contactó a algunos de sus clientes. Entre ellos, se encontraba Eva Longoria, quien, a pesar de no tener experiencia en el cine de acción, decidió apostar por la película.
Longoria, en ese momento, estaba iniciando su carrera como productora y la inversión en John Wick representaba un riesgo significativo para ella. Sin embargo, algo en la determinación y el entusiasmo de los directores la convenció. "No sabía nada sobre cómo se hacía una película," admitió Longoria, "Pero algo que he aprendido es que me gusta invertir en personas. Si son apasionados y han hecho el trabajo, sé que están comprometidos."
Su inversión, que representó una gran parte de su capital en ese momento, fue un acto de fe en el proyecto.
La participación de Longoria fue tan discreta que ni siquiera los directores supieron inicialmente que ella era la persona que había salvado la película. El secreto se mantuvo hasta después del estreno de John Wick, cuando el productor Basil Iwanyk lo reveló a Stahelski y Leitch durante una cena.
La inversión de Longoria se convirtió en una de las decisiones más acertadas de su carrera. Con un presupuesto modesto, la primera entrega de John Wick generó 87 millones de dólares en taquilla mundial, un retorno que multiplicó con creces la inversión. "Sí, aún me llegan cheques," confirmó Longoria recientemente, "Lo que me molesta es no haber estado conectada a todas las secuelas."
El éxito de la película original dio pie a tres secuelas que consolidaron la franquicia como una de las más rentables del cine de acción moderno. El universo expandido de John Wick ha creado no solo películas, sino series derivadas y productos de entretenimiento relacionados, estableciéndose como un ícono de la cultura pop actual.