Aunque la tragedia ocurrió en 2008, Kieran admite que la pérdida aún se siente muy presente. Durante una reciente entrevista, reveló que las experiencias de Dakota se han convertido en un reflejo de su propio personaje en la serie. "Después de un par de temporadas en 'Succession', me di cuenta de que algunas cosas que Roman hacía eran como, 'Ah, eso es mi hermana. Ese era su sentido del humor'", compartió Kieran. "Ella podía encontrar exactamente qué era lo correcto para burlarse de ti, que te llegaría, pero sería realmente gracioso y haría reír a la sala. Esa era ella".
El dolor de la pérdida es un tema universal que muchos pueden entender, y la honestidad de Kieran sobre su lucha personal con la pérdida de Dakota proporciona un recordatorio conmovedor de que la vida es frágil y las cicatrices del dolor pueden permanecer con nosotros para siempre.