Este evento la llevó a buscar consuelo en la comida, un patrón que ha persistido a lo largo de su vida.
Richardson, de 54 años, recordó: “Siempre he luchado con mi peso, así que estoy muy interesada en la salud y el bienestar. Siempre fui activa en la escuela, pero siempre fui la niña gordita”. A medida que su madre enfrentaba complicaciones durante el embarazo, Anna experimentó un aumento de peso significativo, exacerbado por la ansiedad que sentía al ver a su madre en el hospital.
La presentadora de Naked Attraction reveló que, a lo largo de los años, ha probado diversas dietas sin éxito. Sin embargo, su perspectiva cambió al descubrir el régimen 1:1, que ha resultado ser efectivo para ella. Este plan incluye una variedad de opciones como batidos, sopas, y comidas bajas en calorías, limitando la ingesta a un máximo de 1,500 calorías diarias.
Hasta ahora, Anna ha tenido una experiencia positiva con este enfoque, logrando perder medio stone. “Es un programa bajo en calorías y alto en proteínas, y me ha ayudado a replantear mi forma de ver la dieta”, comentó. Además, ha contado con el apoyo de un consultor que la ha guiado en este proceso, proporcionándole técnicas que antes no había considerado.
La presentadora enfatizó la importancia de este apoyo, señalando que ha aprendido a evitar el comer sin pensar, lo que ha sido un desafío en su vida. Con un nuevo enfoque hacia la alimentación y el bienestar, Anna continúa su camino hacia una vida más saludable, demostrando que el cambio es posible con el apoyo adecuado y la mentalidad correcta.