Su historia ha conmovido a muchos, y su legado seguirá viviendo a través de sus fotografías.
La joven fotógrafa que capturó el corazón de la familia real británica ha fallecido tras una larga lucha contra el cáncer. Liz Hatton, de Harrogate, en el centro de Inglaterra, había sido diagnosticada con un sarcoma raro y agresivo a comienzos de año. A pesar de esto, ella siguió adelante con su pasión por la fotografía y logró tomar imágenes del Real Ballet y asistir a la alfombra roja de los premios MTV Europe Music Awards.
Entre sus logros más destacados se encuentra la oportunidad de tomar imágenes del príncipe Guillermo en un acto en el Castillo de Windsor, donde también se reunió con la duquesa de Cambridge, Kate Middleton. "Fue un honor haber conocido a una joven mujer tan valiente y humilde", escribieron los príncipes de Gales en sus redes sociales.
La familia real británica ha expresado sus condolencias por la muerte de Liz Hatton. William y Kate Middleton han enviado un mensaje de apoyo a la familia de la joven, que incluye a sus padres, Vicky y Aaron, y a su hermano Mateo. "Nuestros pensamientos y nuestros rezos están con ustedes en estos difíciles momentos", escribieron.
La madre de Liz Hatton ha pedido a la gente que compartan fotos de su hija en recuerdo y apoyen la recaudación de fondos para la investigación del tumor desmoplasmático de células redondas pequeñas. Además, destacó que Liz pudo presentar su trabajo fotográfico en una exposición en Londres la semana pasada, lo que calificó como "la perfecta culminación de sus increíbles logros".
La vida de Liz Hatton ha sido un ejemplo de valentía y determinación en medio de la adversidad. Su legado seguirá viviendo a través de sus fotografías y su historia seguirá inspirando a muchos.