Sin embargo, detrás de su éxito, hay una historia de introspección y conexión con su lado espiritual.
En una entrevista exclusiva, Dulce María abre su corazón y confiesa que la música ha sido su salvavidas en momentos difíciles. "A mí, la música sí me ayuda y sí me salva", reconoce. Después de vivir la vorágine de la pandemia y el aislamiento, la cantante se ha dedicado a encontrar equilibrio y armonía en su vida.
La llegada de su hija, María Paula, en diciembre de 2020, marcó un punto de inflexión en su vida. "Yo pensé que cuando fuera mamá, iba a parar y me iba a desaparecer un rato", confiesa. Sin embargo, la realidad fue diferente. Participó en la telenovela Pienso en ti, formó parte de la gira de los 2000's Pop Tour y luego llegó el reencuentro de RBD.
Después de 54 shows en cuatro meses, Dulce María se dio cuenta de que necesitaba encontrar un equilibrio entre su carrera y su vida personal. "Creo que 54 shows en cuatro meses no está bien, es demasiado; debe haber una contención", reconoce. Por eso, este año se lo ha dedicado a su esposo, Francisco Álvarez, y su hija María Paula, y al resto de su familia.
La música ha sido un medio para conectar con sus emociones y encontrar su verdad. "A mí, la música sí me ayuda y sí me salva y sí me acompaña en procesos y sí me ayuda a gestionar mis emociones y a sobrellevar la vida", reflexiona. Por eso, decidió grabar una nueva versión de la canción "Ojalá", junto al español Beret.
"Ojalá" es un himno personal de reflexión e introspección que le llegó en el momento indicado. "Ahorita que ya me siento más fuerte y que ya me siento un poquito más tranquila, me parece importante levantar la voz", dice. La canción también representa un proyecto en el que pudo participar toda la familia de Dulce María, ya que el video musical lo dirigió su esposo, Paco Álvarez, y su hija, María Paula, participa en la historia junto a la cantante.
La salud mental es un tema que Dulce María se enfoca en esta canción. "Por ejemplo, esta frase que dice que 'Voy a mirar a la soga pa' decir le sigo' es algo muy fuerte, porque hay momentos donde puedes llegar a perder el sentido (de la vida)", explica. La cantante ha vivido experiencias difíciles en su vida y ha perdido amigos y conocidos a la depresión y la ansiedad.
Después de una etapa de muchas pruebas y de vivir esta aceptación, Dulce María sabe que su camino está lleno de retos y nuevas experiencias que seguirán enriqueciéndola. "Creo que mientras haga las cosas con verdad y con congruencia, las cosas valdrán la pena y pueden conectar con la gente", adelanta la cantante. Por eso, ha hecho un compromiso consigo misma para seguir en la dirección correcta, pero sin meter el acelerador.
En este momento, Dulce María tiene varias composiciones en proceso y está teniendo sesiones de composición. "Quiero que cada cosa, que cada canción que salga, tenga algo que decir, tenga una historia, tenga un peso. Que le pueda tocar el corazón a la gente y sigo en proceso creativo", concluye.