¿Qué tienen en común la corona del rey elfo Thranduil, el traje de Catwoman de Michelle Pfeiffer, y el sombrero de Indiana Jones? ¡Que son algunos de los objetos más icónicos de la historia del cine y la televisión! Y, además, que son algunos de los objetos que quien escribe esta nota ha soñado con tener como parte de su colección particular. Y a pesar de que para mi sólo quede en sueño, este pasado fin de semana, alguien sí hizo realidad su sueño de tener un artículo muy preciado de la película de culto: "El Mago de Oz", de 1939.
¡Y no fue cualquier cosa! Hablamos de las famosas "Zapatillas de Rubí" utilizadas por la gran estrella Judi Garland en el famoso musical. ¡Un objeto que trasciende su valor material y se convierte en un símbolo de la cultura popular!
Estas zapatillas han sido objeto de deseo de muchos coleccionistas y aficionados al cine durante décadas, y recientemente han sido subastadas por la casa de subastas Heritage Auction, por una cantidad que ha dejado a todos sin aliento: ¡32,5 millones de dólares! Un precio tan mágico que transforma a éstas zapatillas en "los tesoros cinematográficos más valiosos del mundo, y ayudaron a hacer de esta, la subasta de entretenimiento la más exitosa jamás realizada”, según Robert Wilonsky, vicepresidente de Relaciones Públicas de la casa subastadora.
Según la página del lote, la subasta se abrió en $1,55 millones de dólares y subió rápidamente.
Participaron 25 postores, y las zapatillas usadas por Judy Garland se vendieron a uno de ellos que participaba por teléfono. Incluyendo las comisiones de la casa de subastas, las zapatillas se vendieron por casi 11 veces su estimación inicial de 3 millones.
Pero ¿Qué más hay detrás de la historia de estas zapatillas? Resulta que este par fue robado hace más de 25 años del museo de Judy Garland en Grand Rapids, Minnesota E.U.; apenas fueron recuperados en el 2018, y en febrero de éste año se le entregaron al coleccionista original, Michael Shaw, quien inicialmente los había prestado al museo. Un final feliz para uno de los 4 pares de estas joyas de lentejuelas rojas que aun sobreviven.
El calzado que ahora nos parece sencillo, es un ejemplo de la habilidad y la creatividad de Adrian Adolph Greenburg como diseñador de vestuario de cine, y así otros tantos diseñadores de vestuario han logrado que objetos se vuelvan icónicos, como los que mencioné al inicio, lo que logra que se puedan vender por grandes cantidades, como el látigo de Harrison Ford en “Indiana Jones y el Templo de la Perdición”, que estableció un récord como objeto más valioso de la franquicia al alcanzar los 525 mil dólares; o el traje original de Catwoman de Michelle Pfieffer, prenda fue adquirida por un comprador anónimo por la cantidad de $41,520 dólares. ¡Artículos mágicos! tanto como las zapatillas de rubí de “El mago de Oz”.
Esta historia ha ganado nueva atención en las últimas semanas con el estreno de la película “Wicked”, una adaptación del exitoso musical de Broadway, una especie de precuela que reimagina el personaje de la Malvada Bruja del Oeste.
¡El mundo del coleccionismo es sorprendente" Esta subasta de las zapatillas usadas por Judy Garland, nos lo demuestra. ¡Quién sabe! Quizás en un futuro próximo hablemos de alguien que adquiera por algunos millones de dólares, alguna pieza del vestuario usado por Ariana Grande o Cynthia Erivo, ¿Un sombrero? ¿Una escoba? ¿Un vestido?, sea lo que sea, es tiempo de empezar a ahorrar.