Se cumplen 30 años de la boda de Céline Dion y René Angélil, un acontecimiento que, en su momento, generó expectación por la notable diferencia de edad entre la pareja. La imagen que conmovió a redes sociales, una fotografía de la ceremonia celebrada en Montreal el 17 de diciembre de 1994, muestra a una radiante Céline, con un vestido blanco de encaje y satén, un tocado brillante y velo tradicional, junto a René. El mensaje de Céline, simple pero profundamente emotivo, decía: “Aún llenas nuestros corazones todos los días. Eres todo para nosotros. Te extrañamos tanto. ¡Feliz 30º aniversario, mon amour!”, firmado por ella y sus tres hijos: René-Charles, de 23 años, y los gemelos Nelson y Eddy, de 14.
Su historia, sin embargo, comenzó mucho antes, en 1980, cuando una joven Céline, con apenas 12 años, audicionó para René, quien se convertiría en su mánager. Una relación profesional que evolucionó, en 1987, hacia un romance que desafió las convenciones. “Tenía miedo de lo que la gente pudiera pensar”, confesó Céline años después sobre la diferencia de edad, pero su amor, “siempre ganó”, como ella misma escribió en sus memorias. El romance floreció en secreto hasta 1993, cuando se comprometieron y decidieron compartir su historia con el mundo.
La muerte de René en 2016, a causa de un cáncer de garganta, representó un duro golpe para Céline, sucedido dos días después por la pérdida de su hermano Daniel, también a causa del cáncer. El dolor se vio reflejado en el emotivo discurso que pronunció su hijo René-Charles durante el funeral de su padre.
Más allá del luto, la vida siguió, pero con nuevos retos. En los últimos años, Céline ha enfrentado el síndrome de la persona rígida, una enfermedad rara que le ha dificultado su carrera musical. Sin embargo, tras un arduo proceso de recuperación, documentado en un emotivo especial, la cantante ha logrado volver a los escenarios, incluso ofreciendo una interpretación memorable en la inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024, demostrando una vez más su valentía y fuerza. “Trabajo los dedos de los pies, las rodillas, las pantorrillas… Quiero estar lo mejor posible”, declaró en una entrevista previa a su presentación.
La historia de Céline y René, un romance que trascendió la pantalla y se convirtió en leyenda, es un testimonio del amor, la pérdida y la perseverancia. Un recuerdo que perdurará a través de la música y el legado de una de las voces más icónicas de la música contemporánea.