Robert Pattinson: Sorpresas de la paternidad y vida cotidiana
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Nicol Matuz Scott
Recientemente, en una entrevista con la revista GQ, Robert Pattinson, conocido por su papel en The Batman y su pasado en Twilight, reveló aspectos de su vida personal que pocos conocían. Más allá del brillo de las alfombras rojas y el glamour de Hollywood, hay una cotidianidad llena de detalles sorprendentes.
La llegada de su primer hijo, fruto de su relación con Suki Waterhouse, ha sido un punto de inflexión. “Hasta que tienes un hijo, hablar sobre niños te parece lo más aburrido del mundo. Pero después… ¡es increíble! De repente, prefieres estar con tu hijo antes que con tus amigos”, confesó el actor, describiendo una transformación que lo ha llevado a una nueva forma de socializar. Ya no son las fiestas exclusivas o las cenas con amigos, sino los parques, las reuniones con otros padres, las inesperadas barbacoas dominicales. "Voy a casas de extraños solo porque sus hijos tienen la misma edad que el mío”, agrega con una sonrisa.
Pero las sorpresas no acaban ahí. Su peculiar gusto por el café instantáneo, una afición que él mismo califica de "muy inglesa", es algo que pocos podrían imaginar. “Me encanta. Más que cualquier otra cosa”, asegura, describiendo su preferencia por el momento en que los gránulos apenas se disuelven. Esto forma parte de una rutina diaria que también incluye una dieta, al menos por el momento, bastante singular.
Durante meses, el salmón ha sido el protagonista de su alimentación. “Me di cuenta de que ya no podía sentir el sabor del salmón… He estado comiendo solo salmón durante meses”, confiesa, comparando su dieta con la de una foca. Esta obsesión, sin embargo, no es nueva. Recuerda su pasado con una lata de atún y salsa Cholula, un hábito que, aunque le encantaba, dejó por temor a la intoxicación por mercurio. El salmón, al parecer, también tiene sus riesgos, pero hasta ahora, sigue siendo su elección.
Y como si fuera poco, Pattinson se ha declarado un ferviente defensor de los auriculares con cable, lamentando la desaparición de opciones de calidad en el mercado. “No quiero cargar nada. Me molesta muchísimo que hayan dejado de hacer audífonos con cable de buena calidad”, afirma, explicando su frustración con los inalámbricos y su incompatibilidad con la forma de sus oídos. Incluso bromea con la posibilidad de convertirse en la imagen de una marca que los reintroduzca.
Finalmente, comparte su descubrimiento de un sencillo estiramiento de cadera que considera "absolutamente transformador", algo que le ha aportado, según sus palabras, al menos diez años más de vida. Una muestra más de cómo las cosas más simples pueden generar grandes cambios. Una lección de vida, incluso para una estrella de cine de fama mundial.
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