Todo comenzó con la 67ª entrega de los premios Grammy. Chappell Roan, al recibir el premio a Mejor Artista Nuevo, aprovechó el escenario para denunciar la falta de atención a la salud y la precaria situación salarial de muchos músicos. Su discurso, directo y conmovedor, no pasó desapercibido. "Si mi disquera hubiera priorizado la salud de los artistas, me habrían dado atención médica," declaró Roan, haciendo referencia a su propia experiencia luego de ser dejada por Atlantic Records en 2020.
Pero su mensaje no fue recibido con aplausos universales. Jeff Rabhan, un ex ejecutivo de A&R con experiencia en Atlantic y Elektra Records, publicó una columna en The Hollywood Reporter donde calificó el discurso de Roan como "wildly misinformed" (completamente mal informado).
La respuesta de Roan no se hizo esperar. A través de sus historias de Instagram, la cantante retó a Rabhan a una inusual propuesta: “@jeffrabhan ¿quieres igualarme con $25,000 para donar a artistas que están luchando y han sido abandonados?”, escribió. “Mi publicista es @biz3publicity, hablemos.” En publicaciones posteriores, Roan instó a Rabhan a que "ponga su dinero donde está su boca", frase que Rabhan usó en su crítica, para demostrar su compromiso con los artistas.
La controversia no se quedó ahí. Halsey se unió al debate, criticando duramente la columna de Rabhan, calificándola de "boot licking behavior" (comportamiento de lamebotas). “La industria musical es un juego de inversión, pero la inversión está orientada a producir los materiales; la persona, el MATERIAL ORGÁNICO que está produciendo ese producto necesita acceso a cosas como la atención médica. Sorprendente, lo sé. Si quieres beneficiarte del arte de alguien más, ese artista debería tener los medios de vida básicos para sentirse lo suficientemente seguro como para crear ese arte," escribió Halsey.
Mientras tanto, Roan también aprovechó la oportunidad para destacar a cuatro artistas que, según ella, merecen más reconocimiento: Hemlocke Springs, Sarah Kinsley, Devon Again y Baby Storme. Su acción ha generado un diálogo importante sobre la necesidad de una mayor protección y mejores condiciones laborales para quienes crean la música que escuchamos todos los días. La fundadora y CEO de la Music Healthcare Alliance, Tatum Allsep, expresó su apoyo a Roan y a la causa, enfatizando la importancia de que los jóvenes artistas sepan que no tienen que sufrir en silencio.