Kimberley Garner: Éxito, amor y una nueva vida en Londres

Este es el caso de una figura pública conocida por su estilo de vida glamoroso y sus emprendimientos en el mundo de la moda.
Kimberley Garner, la diseñadora de trajes de baño de 34 años y ex estrella de Made In Chelsea, ha estado en el ojo del huracán últimamente, no solo por sus exitosas colecciones de bikinis, sino también por su vida sentimental. Recientemente, se la ha visto disfrutando de un día soleado en la playa, luciendo un bikini diminuto de color lila, imágenes que rápidamente se volvieron virales en las redes sociales. El video, publicado en Instagram, muestra a Kimberley con total confianza y alegría, paseando por la arena acompañada de algunos amigos peludos.
Pero la atención no se centra solo en su figura envidiable. "Simplemente estoy disfrutando de la vida", comentó a medios británicos hace apenas una semana. Esta declaración, a simple vista inocente, esconde un trasfondo de importantes cambios en su vida. El video en la playa llega justo después de la presentación de su última colección, con un bikini verde y blanco que ya se ha convertido en un éxito de ventas.
Se rumorea que estos cambios se deben, en parte, a una nueva relación sentimental. Después de una ruptura con el financiero Andreas Anthis en Abril del año pasado, Kimberley confirmó el pasado noviembre su relación con William Claeyssens de Tena, un atractivo comerciante de 30 años. La pareja fue vista por primera vez junta en la Gala del Chain of Hope. "Nos conocimos a través de amigos", declaró Kimberley a la revista Mail on Sunday, "esta es nuestra segunda cita." William, según su perfil de Instagram, divide su tiempo entre Marbella y Londres, y parece disfrutar de una vida plena llena de actividades al aire libre y eventos exclusivos.
Además de su vida amorosa, Kimberley también ha anunciado importantes cambios en su vida personal. Recientemente confirmó la compra de una nueva casa en Belgravia, Londres, y la venta de su propiedad en Miami. Esta decisión, según sus propias palabras, no está relacionada con la política estadounidense, sino con su deseo de regresar al Reino Unido y estar más cerca de su familia y amigos. "Amo Estados Unidos, pero adoro la cultura británica; es donde crecí, y me siento muy a gusto aquí," afirmó.
La empresaria, que ha logrado construir un imperio en la industria de la moda, demuestra que para ella el éxito radica en encontrar el equilibrio perfecto entre sus ambiciones profesionales y su felicidad personal, un mensaje que resuena con fuerza entre las mujeres mexicanas de su generación.