Elisa Beristain denuncia agresiones y traición en Chisme No Like

Esta vez, una historia impactante ha salido a la superficie, relatando una experiencia dolorosa que pone en relieve la importancia de la salud mental y la valentía para enfrentar la adversidad.
Elisa Beristain, reconocida presentadora que recientemente inició un nuevo capítulo en su carrera con el canal de YouTube 'Beristime', ha decidido romper el silencio. Después de años de mantener una discreta postura tras el fin de su participación en 'Chisme no Like', ha compartido un relato conmovedor y revelador en un video que ha generado gran impacto en redes sociales.
Durante años, según relata Elisa, sufrió “un tormento que se disfrazaba de ‘broma’ en el ambiente laboral”. El relato detalla un patrón de agresiones verbales constantes, incluyendo comentarios hirientes y despectivos. Se le llamaba “gorda” y “vieja”, a pesar de sus reiteradas peticiones para que cesaran estos ataques. Esta situación, agravada por su lucha contra la comeduria compulsiva, la llevó a un punto crítico.
“Soy comedora compulsiva y cada vez que me decía algo así, me ponía mal. Llegó a tal grado que tuve que internarme dos veces debido al daño emocional que me causaba”, confesó con la voz entrecortada por la emoción. Este testimonio no solo expone la gravedad de las agresiones verbales, sino también el impacto devastador que estas pueden tener en la salud mental.
Pero la historia va más allá de las agresiones directas. Elisa denuncia una supuesta traición por parte de un excompañero, al cual acusa de manipular la narrativa pública para mostrarse como víctima y presentarla a ella como la antagonista. “Una traición que se gestó a mis espaldas… esa persona que vino con piel de oveja actuando sin dar la cara como una alimaña. Le di toda mi confianza y apoyo, y jugó con la verdad, manipulando a muchos que creyeron en él”, relata con profunda tristeza.
El silencio mantenido durante un tiempo se quebró ante la persistencia de una campaña de desprestigio. “He callado por respeto, por ética… pero ya no puedo más. Durante seis años fui agredida verbalmente… No voy a permitir que siga aprovechándose de mí ni de ninguna mujer. ¡Basta ya!”, declaró con firmeza. Elisa afirma poseer pruebas, incluyendo documentación médica que corrobora sus hospitalizaciones.
La narrativa, sin mencionar nombres explícitamente, ha desatado una ola de especulaciones. En un giro final, Elisa critica duramente la falta de valentía de su excompañero para una confrontación directa, prefiriendo el ataque público. “Esa persona no tiene los huev0s para hablar de frente, pero sí para hablar mal de mí. Es un narcisista que distorsiona la verdad y manipula a la gente. Me agarró seis años de bajada, pero ya basta, me voy a defender”, concluye.