Natanael Cano, "El Chapo" y la controversia en la música regional mexicana

Recientemente, un video en las historias de Instagram de Natanael Cano ha desatado una ola de comentarios. En él, el cantante aparece usando unos llamativos pantalones de mezclilla. Pero no se trata de cualquier diseño; los pantalones llevan impresas las imágenes de Joaquín "El Chapo" Guzmán y Pablo Escobar. Además, luce un reloj Rolex. Todo esto, aparentemente un adelanto de su nuevo sencillo, que podría titularse "Cholo", según se observa en el monitor del estudio.
Este hecho, aunque aparentemente trivial, refleja un contexto más amplio. Se suma a la situación legal de Los Alegres del Barranco, grupo musical conocido por sus narcocorridos. El grupo enfrenta un juicio por "apología del delito" en Jalisco.
¿El motivo? La proyección de imágenes de Nemesio Oseguera, "El Mencho", líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), durante sus conciertos en Jalisco y Michoacán. Un juez de Zapopan ha ordenado un proceso penal contra los tres integrantes, con medidas cautelares que incluyen firma semanal, restricción para salir del estado (salvo presentaciones pre-aprobadas) y una fianza de 1.8 millones de pesos. El artículo 142 del Código Penal del estado establece sanciones de hasta seis meses de prisión. Para empeorar la situación, Estados Unidos revocó sus visas de trabajo y turismo a inicios de abril.
La situación de Los Alegres del Barranco, junto con la elección de vestuario de Natanael Cano, pone en relieve un debate crucial: la responsabilidad social de los artistas y el impacto de la glorificación de figuras del crimen organizado en la música regional mexicana. Este debate adquiere mayor relevancia frente al reciente anuncio del festival "México Canta", impulsado por la presidenta Claudia Sheinbaum, que busca promover una imagen más positiva de la música regional mexicana, alejada de la apología de la violencia.
El contraste entre la iniciativa de "México Canta" y las acciones de estos artistas genera una reflexión sobre la evolución y el futuro de este género musical en el panorama cultural mexicano. La intersección entre moda, música, ley y cultura, deja un escenario complejo para analizar.