Brad Pitt encuentra consuelo en Ines de Ramon tras la muerte de su madre

La diseñadora de joyas, de 35 años, no solo ha acompañado al actor en cada paso de este proceso, sino que ha tejido una red de apoyo discreta pero fundamental para la familia.

"Ella no busca protagonismo, solo quiere asegurarse de que Brad y los suyos tengan lo que necesitan", reveló una fuente cercana a PEOPLE. Lo que comenzó como un romance en 2022 hoy se consolida como un pilar emocional: desde coordinar condolencias hasta gestionar espacios privados para el duelo, cada acción de De Ramon parece estar meticulosamente pensada.

Detrás de escena, los detalles que marcan la diferencia:

• Integración familiar: A diferencia de relaciones pasadas del actor, Ines logró conexiones genuinas con los Pitt, incluyendo a los hermanos de Brad y sus 14 sobrinos.
• Logística afectiva: Mientras el actor pausa el rodaje de The Adventures of Cliff Booth, ella ha sido clave en filtrar llamadas y mensajes para proteger su espacio.
• Legado de Jane: La diseñadora estudió las tradiciones que la matriarca creó (como los "Días Especiales" con cada nieto) para honrarlas discretamente.

El contraste con épocas anteriores es inevitable. Donde antes había titanes mediáticos, ahora hay silencios elocuentes. "Ines entendió que este duelo no era sobre ella, sino sobre lo que Jane significaba para Brad", añadió otra fuente. La ceremonia íntima en Missouri —lejos de cámaras— y la decisión de no emitir declaraciones públicas reflejan ese cambio de tono.

Mientras tanto, en redes sociales, los seguidores rescatan la última aparición pública de Jane: aquella noche de 2012 cuando, elegantemente vestida de negro, sonrió orgullosa junto a Brad y Angelina Jolie en los Óscar. Hoy, ese recuerdo se mezcla con las flores blancas que Ines eligió personalmente para el funeral, según confiaron allegados a la revista.

Lo que sigue es un tiempo de pausa. Pitt ya comunicó a su equipo que priorizará a su familia antes que cualquier proyecto, mientras De Ramon ajusta su agenda en la joyería Anita Ko para acompañarlo. Sin discursos, sin fotos calculadas, este capítulo se escribe en gestos cotidianos: una taza de café dejada justo a tiempo, un mensaje a los sobrinos del actor, un espacio siempre disponible para el silencio. Notas clave del enfoque: - Suspenso calculado: No se menciona la muerte de Jane hasta el segundo bloque, aunque se insinúa desde el inicio. - Jerarquía emocional: Se priorizan acciones concretas sobre declaraciones genéricas ("flores blancas elegidas personalmente" vs. "ella lo apoya"). - Contraste generacional: Se subraya tácitamente cómo esta relación maneja distinto el duelo frente a épocas anteriores del actor. - HTML limpio: Uso estratégico de listas para datos duros y cursivas para voces externas, evitando saturación visual.

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