Croacia
Investigadores croatas las están entrenando aprovechando su sentido del olfato.
A Mirjana Filipovic aún la asalta el recuerdo de la explosión de una mina que provocó la muerte de su novio y a ella le voló la pierna izquierda hace casi una década durante un paseo por un campo que supuestamente había sido desminado.
Ahora, unos héroes inesperados podrían estar por llegar para prevenir tragedias similares: las abejas. Investigadores croatas las están entrenando para que detecten minas sin explotar que persisten amenazantes en varias partes del país y el resto de los Balcanes.
Se sospecha que unos 750 kilómetros cuadrados (466 millas cuadradas) están llenos de minas por las guerras de los Balcanes en la década de 1990.
Nikola Kezic, un experto sobre el comportamiento de las abejas, trabajaba recientemente con un grupo de investigadores jóvenes en una carpa llena de estos insectos. El profesor de la Universidad de Zagreb explicó la idea del experimento: las abejas tienen un sentido muy desarrollado de olfato que puede detectar rápidamente el aroma de los explosivos. Son entrenadas para identificar su alimento con el aroma del TNT.
“Nuestra conclusión básica es que las abejas pueden detectar claramente este objetivo, y estamos muy satisfechos”, dijo Kezic, que dirige parte de un amplio programa europeo llamado “Tiramisú”.
Kezic dijo que los sitios de alimentos con vestigios de TNT ofrecen “una solución azucarada como recompensa, por lo que pueden encontrar el alimento en el medio”.