El 19 de septiembre se ha convertido en un día difícil para los mexicanos, debido a que tres sismos de más de 7.0 grados en la escala de Ritcher azotaron al país en los años 1985, 2017 y 2022.
“La diferencia más grande con respecto al sismo de 1985 son las herramientas tecnológicas que se han desarrollado en el mundo”, consideró el gerente de investigación de mercados de The Competitive Intelligence Unit, Rolando Alamilla.
A lo que se añade la gran penetración de líneas móviles que permiten aprovechar esas tecnologías para tener quizás algunos segundos que podrían salvar vidas.
Por ejemplo, sólo en México se contabilizaron 135.2 millones de líneas móviles de las cuales 126.9 millones están relacionadas a un teléfono inteligente al cierre del segundo trimestre de este año.
“Al dividir un sismo en tres fases podemos encontrar distintas aplicaciones de las telecomunicaciones para cada una de estas fases”, detalló el especialista.
PREVENIR
Existen aplicaciones que pueden utilizarse para estar listo ante un desastre natural como puede ser un sismo.
Destacan aquellas que emiten alertas para avisar sobre la aproximación de un temblor como SkyAlert, lo que es muy útil en localidades donde no se tiene una alerta sísmica.
Éstas suelen utilizar el mismo sistema que las autoridades o, bien, tener su propia red de sensores, por lo que el teléfono inteligente empieza a sonar antes de que suceda el evento.
Lo anterior brinda a los usuarios unos segundos de ventaja para que puedan ponerse a salvo.
Hay que considerar que varias aplicaciones de este tipo pueden descargarse de manera gratuita y, adicionalmente, ofrecen algunos servicios que sí tienen un costo.
También se debe poner atención si la aplicación brinda alertas en todos los estados o está limitada a algunas zonas como el Valle de México. Además de SkyAlert existen otras opciones como SismosMX, SASSLA Monitor de Sismos y Alerta Sísmica DF.
ORGANIZACIÓN
Tanto el temblor de 1985 como el de 2017 demostraron que los mexicanos se apoyan entre sí en las crisis y la tecnología hace esto más fácil.
Hace cinco años, tan sólo pasaron minutos para que las personas utilizaran las redes sociales para formar brigadas con el fin de remover escombros y ayudar a las personas atrapadas.
Entre las principales plataformas que usaron estaban Facebook, Twitter e Instagram. A lo que se añadió la creación de páginas web sobre los métodos de ayuda, ya sea con donaciones monetarias o en especie.
Lamentablemente, esto también significó una oportunidad para quienes difunden información falsa o errónea.
“Al ser tan fácil el acceso y en muchas ocasiones se desconoce el funcionamiento de las redes sociales, se comparte información que no está verificada o que es de días u horas anteriores esto genera mucho desconcierto entre personas que llegan a un sitio y ofreciendo ayuda que por el momento ya no es necesaria”, advirtió el especialista de The Competitive Intelligence Unit.
Por eso, lo más recomendable es hacer un uso responsable de las redes sociales siempre y, sobre todo, en momentos de crisis.
Entre las aplicaciones oficiales que se pueden utilizar en desastres naturales como un sismo destaca Primeros Auxilios de la Cruz Roja Mexicana. Tiene animaciones, videos referencias, casos e información general para aprender primeros auxilios desde el celular.