Netflix está devolviendo parte del dinero a los anunciantes por no cumplir con las audiencias prometidas en los contratos de publicidad del plan básico con anuncios, alcanzando en algunos casos aproximadamente el 80 por ciento de la audiencia esperada.
La plataforma de contenido lanzó el plan básico con anuncios, que reduce el precio de entrada a la plataforma. A cambio, incluye publicidad, disminuye la calidad de reproducción y suprime del catálogo algunos de los títulos más vistos.
Este nuevo plan de suscripción no está alcanzando el número de visualizaciones por anuncio que había acordado con las empresas anunciantes, quedándose en torno al 80 por ciento de lo estimado. Un debut lento en el crecimiento de usuarios que le ha obligado a devolver el dinero de los anuncios no mostrados, según las declaraciones de cinco ejecutivos de agencias recogidos por la revista estadounidense Digiday.
Sin embargo, no todos los anunciantes han solicitado recuperar su dinero. Quienes lo tienen de vuelta han sido empresas que estaban realizando campañas de marketing específicamente programadas para estas fechas y han querido reasignar este gasto. No obstante, otras empresas se han decantado por mover esa inversión a los primeros meses de 2023, confiando en que la audiencia seguirá creciendo hasta cumplir las garantías acordadas para entonces.
El sistema de acuerdos publicitarios de Netflix se basa en un pago bajo demanda en el que los anunciantes pagan por la cantidad estimada de alcance de sus anuncios y, en caso de no llegar a esa cantidad, Netflix liberaría el dinero publicitario no gastado al final del trimestre.
Además, Netflix es la plataforma más cara de este sector para invertir en anuncios. La plataforma cobraba inicialmente 65 dólares por cada mil reproducciones del anuncio, mientras que Disney+, que también lanzó su plan de suscripción con anuncios el 7 de noviembre, tiene un precio de 50 dólares. Ahora, aunque Netflix ha disminuido el precio hasta los 55 dólares, continúa siendo más cara que su rival.
La devolución a los anunciantes deja a Netflix en una mala situación. Sin embargo, los ejecutivos de las agencias plantean que puede ser “síntoma de la rapidez con la que la compañía lanzó ese negocio”, en lugar de una señal de las perspectivas a largo plazo de Netflix.
Igualmente, la plataforma continúa buscando acuerdos publicitarios de cara a 2023, según han detallado los ejecutivos, quienes tampoco descartan que, de cara a conseguirlos, Netflix tenga que disminuir aún más el precio por anuncio.