WASHINGTON
El mandatario se reúne con los mandos de Newtown, Aurora y Oak Creek, entre otros.
El presidente de Estados Unidos recurrió a las agencias para el cumplimiento de la ley el lunes en su esfuerzo por endurecer las reglas para portar armas, al reunirse en la Casa Blanca con los jefes de policía de ciudades golpeadas por tiroteos masivos.
Obama reiteró su deseo de que los legisladores aprueben las medidas que dio a conocer recientemente para reducir la violencia armada, incluida una prohibición sobre armas de asalto y la revisión universal de antecedentes para la compra de armamento.
El mandatario ha hecho de la aplicación de medidas más estrictas sobre el control de armas uno de los principales objetivos de su política.
La reunión fue la más reciente de una serie de discusiones que Obama está usando para tratar de obtener apoyo político para un control de armas más estricto después de que 20 niños y seis adultos fueron asesinados en diciembre por un hombre armado en una escuela en Newtown, Connecticut.
El jefe de policía de Newtown, Michael Kehoe, asistió al encuentro con sus homólogos de Aurora, Colorado, donde 12 personas fueron asesinadas y 58 resultaron heridas en un tiroteo masivo en una sala de cine en julio del año pasado, y con el titular de Oak Creek, Wisconsin, donde seis personas fueron muertas a tiros y cuatro resultaron lesionadas en un templo sikh en agosto.