La startup Neuralink, fundada por Elon Musk, ha iniciado la búsqueda de un segundo participante para su ensayo clínico humano. Esta solicitud se produce después de que la empresa implantara un chip cerebral en su primer participante, Noland Arbaugh, de 30 años, hace cinco meses. Recientemente, la compañía admitió que el implante de Arbaugh presentó problemas inesperados, con los hilos que conectaban el chip a su cerebro retraídos, lo que afectó su rendimiento. A pesar de ello, Arbaugh afirma que el implante, que le permite controlar un cursor de computadora con su mente, ha cambiado su vida.
Ahora, Neuralink busca más personas para probar su chip cerebral, especialmente aquellas con cuadriplejia que deseen explorar nuevas formas de controlar sus computadoras. La ambición final de Neuralink es conectar cerebros humanos a computadoras, lo que podría ayudar a personas paralizadas o ciegas a recuperar funciones perdidas. Los actuales participantes en el ensayo formarán parte del Estudio PRIME de Neuralink, que busca estudiar la seguridad y funcionalidad del dispositivo. Sin embargo, los consumidores no podrán acceder ampliamente a esta tecnología en el corto plazo, ya que se necesitará una aprobación regulatoria más amplia antes de que los implantes cerebrales de Neuralink estén disponibles en el mercado.