Se ha observado un preocupante aumento en los robos de cables en estaciones de carga para vehículos eléctricos en Estados Unidos. Los ladrones buscan el cobre contenido en los cables, cuyo precio se encuentra cerca de un máximo histórico en los mercados globales.
Un atraso para las nuevas tecnologías
Esta tendencia ha generado inconvenientes para los propietarios de vehículos eléctricos, quienes se ven obligados a buscar desesperadamente estaciones de carga en funcionamiento. La situación ha despertado la preocupación de las principales compañías automotrices, que han apostado fuertemente por la transición hacia los vehículos eléctricos en medio de la creciente conciencia sobre el cambio climático.Las estaciones de carga de diversas compañías, como Electrify America, Flo y EVgo, han sido blanco de los ladrones, lo que ha llevado a un aumento en los casos de robo de cables en ciudades como Seattle, Oakland, Houston y otras localidades de Estados Unidos. La pérdida de cables no solo afecta a los propietarios de vehículos eléctricos, sino que también representa un obstáculo para la expansión de la infraestructura de carga, crucial para la adopción masiva de los EVs.
Ante esta situación, las empresas están implementando medidas de seguridad adicionales, como la instalación de más cámaras de vigilancia y la colaboración con las autoridades para identificar a los responsables. A pesar de que el cobre contenido en los cables robados tiene un valor relativamente bajo para los ladrones, el costo de reemplazar los cables resulta significativamente más alto para las compañías de carga.
En ciudades como Minneapolis, donde los robos son recurrentes, el reemplazo de un solo cable puede llegar a costar alrededor de $1,000. Las autoridades locales y las empresas están trabajando en conjunto para combatir esta problemática, instando a los propietarios de vehículos eléctricos a estar atentos y reportar cualquier actividad sospechosa en las estaciones de carga. A pesar de los desafíos, se espera que las acciones coordinadas entre las partes involucradas contribuyan a disminuir los casos de robo y garantizar la disponibilidad de puntos de carga para los usuarios de vehículos eléctricos.