Este crecimiento se atribuye principalmente a la llegada de inmigrantes, quienes han impulsado el crecimiento demográfico durante la última década.
Las cifras de la Encuesta Anual sobre la Comunidad Estadounidense revelan que los migrantes extranjeros representan más de dos tercios del crecimiento poblacional de Estados Unidos. Esto se debe en parte al decrecimiento de la tasa de natalidad en el país, lo que ha provocado una mayor dependencia en la inmigración para mantener el crecimiento de la población.
Latinoamérica se ha convertido en el motor principal de la inmigración a Estados Unidos, con un aumento significativo en la proporción de residentes nacidos en esa región. De hecho, es la única región del mundo que ha experimentado un aumento en la proporción de residentes nacidos en el extranjero, mientras que las proporciones de personas provenientes de Europa y Asia han disminuido ligeramente.
La historia de dos mujeres inmigrantes ilustra la realidad de la vida en Estados Unidos para aquellos que buscan una mejor vida. Luciana Bracho, una joven abogada venezolana, llegó a Miami legalmente a través de un programa gubernamental de permiso de permanencia temporal. Ella destaca las ventajas de vivir en Estados Unidos, como la posibilidad de tener ahorros y acceso a servicios básicos.
Nicole Díaz, también venezolana, se mudó a Miami con su esposo e hija después de vivir en Perú y Ecuador. Ella describe la facilidad de trabajar en Estados Unidos, pero resalta los desafíos de la vivienda costosa, un problema común para muchos inmigrantes.
Las cifras de la Oficina del Censo no distinguen entre inmigrantes legales e ilegales, por lo que no se puede determinar la proporción de cada tipo de inmigrante.
La inmigración irregular se ha convertido en un tema central en la contienda presidencial de 2024, a pesar de que los cruces fronterizos no autorizados desde México han disminuido este verano.
Es importante destacar que el envejecimiento de la población estadounidense también ha sido un factor relevante en el panorama demográfico del país. La edad media ha aumentado y la proporción de personas mayores de 65 años ha crecido, mientras que la proporción de personas de menos de 18 años se ha mantenido estable.
Este crecimiento en la población inmigrante, junto con el envejecimiento de la población estadounidense, está dando forma a la sociedad y la economía del país, planteando nuevos retos y oportunidades.