La noticia ha generado un revuelo sin precedentes, y los expertos buscan explicaciones para este meteórico ascenso.
¿Qué ha impulsado esta escalada? La respuesta parece estar ligada a la victoria electoral de Donald Trump. Muchos analistas especulan que el nuevo gobierno podría ser favorable a las empresas de Musk, considerando su apoyo activo durante la campaña.
Garrett Nelson, analista senior de renta variable de CFRA Research, lo expresa con claridad: "Tesla y su CEO, Elon Musk, son quizás los mayores ganadores del resultado electoral, y creemos que la victoria de Trump ayudará a acelerar la aprobación regulatoria de la tecnología de conducción autónoma de la compañía".
En efecto, la empresa ha estado trabajando en la implementación de vehículos autónomos, una tecnología que enfrenta diversos obstáculos regulatorios. La esperanza de un trato favorable con la nueva administración ha despertado el optimismo en el mercado.
Más allá de las especulaciones, es innegable que el desempeño de Tesla ha sido excepcional. La compañía ha registrado un aumento significativo en su margen de beneficios trimestral, impulsado por las ventas de su software de asistencia a la conducción autónoma "Full Self Driving".
La empresa se ha consolidado como la fabricante de automóviles más valiosa del mundo, dejando atrás a gigantes como Toyota Motor y BYD. Su valor de mercado actual supera en varios cientos de miles de millones de dólares a sus competidores.
La situación actual ha generado debates acalorados. Algunos consideran que la valoración de Tesla es excesiva, considerando el riesgo que aún implica la tecnología de conducción autónoma. Sin embargo, la confianza en Musk y sus planes para el futuro de la empresa se mantiene firme, lo que podría dar pie a un desarrollo aún más acelerado en el mercado.