El sonido, que parecía provenir de la calle, alertó a un vecino, quien no dudó en marcar el 911. A las 6:00 AM, aproximadamente, un equipo de la policía de Nueva York respondió a la llamada, dirigiéndose a la dirección especificada: 1102 Reverend James Polite Avenue.
Lo que encontraron allí cambió el curso de una mañana cualquiera. En el suelo, junto a un edificio de apartamentos, descubrieron una pequeña bolsa de plástico. Dentro, envuelta en una manta, yacía una recién nacida. Según fuentes policiales, la bebé estaba viva, aunque su estado requería atención inmediata.
"La bebé fue encontrada con hipotermia, pero afortunadamente, se encuentra estable", declaró un oficial, resaltando la rapidez de la respuesta y el cuidado prestado. Los primeros auxilios se le administraron en el lugar, antes de ser trasladada a un hospital cercano para una evaluación completa.
La investigación se encuentra en curso. Las autoridades están trabajando para identificar a la madre y determinar las circunstancias que llevaron al abandono de la pequeña. Se revisan las cámaras de seguridad de la zona y se recolecta evidencia para esclarecer este incidente que ha conmovido a la comunidad del Bronx.
Mientras tanto, el destino de esta pequeña recién nacida queda en manos del sistema de protección infantil de Nueva York. Su futuro, incierto hasta hace apenas unas horas, ahora depende de la respuesta solidaria de una sociedad que, al escuchar su llanto, respondió con un acto de esperanza y determinación.