La derogación de la norma que designaba ciertos lugares como "zonas sensibles" para las redadas de inmigración en Estados Unidos ha generado incertidumbre. Esta decisión, anunciada el 28 de enero de 2025, afecta directamente a espacios como hospitales, iglesias y escuelas, donde antes existían protecciones adicionales para inmigrantes. Ahora, según especialistas legales como Alexis S. Gilroy, Heather M. O’Shea, Claire E. Castles, B. Kurt Copper, Ann T. Hollenbeck y Micah M. Doak, la situación se presenta compleja.
Las abogadas, en un artículo publicado en Lexology.com, destacan la importancia de la Ley de Tratamiento Médico de Emergencia y Parto (EMTALA). Esta ley, afirman, "impone obligaciones en relación con las personas que se presentan en el departamento de emergencia del hospital independientemente de su estatus migratorio". Esto significa que los hospitales estadounidenses aún tienen la obligación de brindar atención médica a cualquier persona que la necesite, sin importar su situación migratoria.
Sin embargo, la eliminación de la designación de "lugares sensibles" complica las cosas. Como explican las expertas legales: "La política de 2011 les otorgaba a dichos lugares consideraciones procesales especiales y aumentaba las condiciones en las que se podían llevar a cabo las acciones de aplicación de la ley del ICE en estas áreas sensibles. Esas restricciones ahora han sido rescindidas."
Ante este escenario, los hospitales buscan estrategias para proteger a sus pacientes. Las medidas propuestas incluyen:
- Capacitación del personal sobre la EMTALA y sus implicaciones.
- Revisión de protocolos de seguridad y control de acceso a las instalaciones.
- Actualización de políticas internas sobre la interacción con las fuerzas del orden.
- Ampliación de los recursos de información sobre los derechos de los pacientes, incluyendo la distribución de materiales de "Conozca sus derechos".