El foco de atención se centra ahora en Southern California Edison (SCE), una empresa de servicios públicos que se encuentra en el ojo del huracán. Dos incendios, el de Hurst y el de Eaton, están bajo la lupa de las investigaciones.
El incendio de Hurst, si bien no causó víctimas mortales ni daños a estructuras, ha llevado a SCE a admitir una posible responsabilidad. “En ausencia de pruebas adicionales, SCE cree que su equipo podría estar asociado con la ignición del incendio de Hurst”, señala un informe presentado a los reguladores estatales. Este incendio consumió aproximadamente 3.2 kilómetros cuadrados alrededor de Sylmar.
La situación es mucho más grave en el caso del incendio de Eaton, en Altadena. Este siniestro, que cobró la vida de al menos 17 personas y causó una destrucción masiva, es investigado por las autoridades y también por la propia SCE. La empresa ha reconocido que está analizando un video donde se aprecian posibles “destellos de arcos eléctricos” desde una torre cercana al origen del incendio. Sin embargo, en una investigación preliminar, SCE afirma no haber encontrado pruebas que confirmen esta hipótesis.
El informe detalla que se detectaron algunos daños en el equipo, pero que “SCE no sabe cuándo ocurrió el daño, y está en marcha una comparación de fotografías antes y después del incendio”. Diversas demandas legales contra SCE, que hacen mención de este video, alegan que el equipo de la compañía provocó el incendio de Eaton; pero SCE mantiene que es prematuro afirmarlo.
Mientras tanto, el incendio de Palisades, otro de los grandes incendios que azotaron la región, también está bajo escrutinio. Este incendio, que fue completamente contenido, causó la muerte de al menos 12 personas y la destrucción de miles de hogares.
La investigación continúa y las preguntas siguen sin respuesta. La magnitud de la tragedia y las implicaciones para SCE aún se están desarrollando. La presión sobre la compañía para determinar las causas exactas de los incendios y asumir la responsabilidad, si corresponde, es inmensa.