Tragedia en piscina: Niño de 22 meses muere ahogado en Illinois
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El lunes pasado, en la cuadra 1900 de la Ruta 22 de Illinois, se registró una emergencia que movilizó rápidamente a los servicios de emergencia. El tiempo, en situaciones como esta, se convierte en un factor crucial. La respuesta inmediata de los cuerpos de rescate fue ejemplar: el Departamento de Bomberos de Deerfield-Bannockburn y el Departamento de Policía de Bannockburn llegaron a la residencia en menos de dos minutos.
La tragedia se centró en una piscina cubierta residencial. Un pequeño luchaba por su vida. Los paramédicos y bomberos iniciaron de inmediato las maniobras de reanimación cardiopulmonar, una carrera contra reloj para salvar al niño. A pesar de todos los esfuerzos, el pequeño fue trasladado al Hospital Highland Park, donde lamentablemente, fue declarado sin vida.
La investigación posterior, realizada por las autoridades, reveló la identidad del menor: Noah Probst, de tan solo 22 meses de edad, procedente de Peotone, Illinois. La oficina del forense del condado de Lake confirmó la causa de la muerte: ahogamiento.
La investigación policial descarta, hasta el momento, la posibilidad de un crimen. Se trata de una tragedia familiar que destaca la importancia de la supervisión constante de los niños, especialmente en entornos con agua, independientemente de si se trata de piscinas públicas o privadas. Los detalles de la investigación permanecen bajo custodia policial mientras se concluye el proceso de recopilación de datos.
La pérdida de Noah es una lamentable noticia que sirve como recordatorio para reforzar las medidas de seguridad en el hogar, priorizando la prevención de accidentes similares. Es imperativo la concientización y la adopción de protocolos para la protección de los más pequeños.