Cambio de horario: ¿Cuándo regresa el horario de verano en Estados Unidos?
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El domingo 9 de marzo, a las 2:00 a.m., los relojes de la mayoría de los estados estadounidenses (excepto Hawái y Arizona) darán un salto de una hora hacia adelante. Esto significa una hora menos de sueño para millones de personas, pero también la promesa de tardes más largas con luz solar.
Esta práctica, instaurada en 1918 durante la Primera Guerra Mundial, busca optimizar el uso de la luz natural y, en teoría, ahorrar energía. Sin embargo, sus efectos son objeto de debate. “El horario de verano es inconveniente y muy costoso para nuestra nación,” afirmó en su momento el expresidente Donald Trump, reflejando una opinión compartida por muchos.
Aunque la mayoría de los dispositivos electrónicos se ajustarán automáticamente, recuerda que deberás adelantar manualmente tus relojes analógicos, microondas y otros aparatos. Es recomendable realizar este ajuste el sábado 8 de marzo, para evitar imprevistos.
El debate sobre la conveniencia del horario de verano ha impulsado iniciativas como la Sunshine Protection Act, propuesta por el republicano Vern Buchanan y el entonces senador Marco Rubio. Esta ley busca establecer el horario de verano de manera permanente, eliminando el cambio bianual. El impacto que esto tendría en los patrones de sueño y en la economía del país es aún materia de estudio.
Los datos revelan una división en la opinión pública: una encuesta de YouGov indica que el 50% de los estadounidenses prefieren mantener el horario de verano, mientras que el 31% opta por el horario estándar. La polarización de opiniones evidencia la complejidad de una decisión que impacta directamente la vida de millones.
El origen del horario de verano se remonta al siglo XVIII, con figuras como Benjamín Franklin proponiendo la idea. Su implementación a gran escala durante las guerras mundiales consolidó la práctica, aunque su evolución legislativa ha sido constante a lo largo de la historia. Desde la Ley de Horario Uniforme de 1966 hasta las modificaciones del 2007, la legislación ha buscado ajustar el horario de verano a las necesidades cambiantes del país.
El cambio de horario es, sin duda, un tema que genera conversación y debate en Estados Unidos. Su influencia en la vida diaria, en la salud y en la economía es un campo de estudio continuo y multifacético.