Papa Francisco: Estado crítico pero estable, Roma en vilo
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Nicol Matuz ScottEl centro de todo esto: el Papa Francisco, hospitalizado desde hace doce días en el hospital Gemelli. A sus 88 años, el pontífice enfrenta una doble neumonía, una situación que, según el comunicado oficial del Vaticano emitido el martes por la noche, se describe como "crítica pero estable".
Si bien el Vaticano asegura que el Papa "reanudó su trabajo por la mañana", recibiendo la eucaristía y atendiendo asuntos de la Santa Sede, el "pronóstico permanece reservado," una frase que ha alimentado la inquietud global. Incluso se le realizó una tomografía computarizada de control para monitorear la evolución de la neumonía bilateral.
La visita del Cardenal Pietro Parolin y el Arzobispo Edgar Peña Parra, los números dos y tres del Vaticano respectivamente, el lunes, es un dato relevante. Durante este encuentro, el Papa autorizó la canonización de dos laicos, uno de Venezuela y otro de Italia, y convocó un consistorio, aunque no especificó fecha. Entre ellos, José Gregorio Hernández Cisneros, conocido como el "Médico de los pobres", se convertirá en el primer santo de Venezuela.
Mientras tanto, la información contradictoria fluye. Se desmintió un rumor del semanario francés Paris Match sobre un posible traslado a otro hospital. A pesar de todo, un video de Gabriel Romanelli, cura de la parroquia Sagrada Familia de Gaza, muestra la llamada del Papa a la comunidad desde el hospital, un acto que subraya su tenacidad incluso en medio de la enfermedad. "Todo el mundo está rezando por usted," afirma Romanelli en el video.
La situación ha generado una ola de mensajes de apoyo de líderes mundiales, desde Donald Trump hasta Emmanuel Macron, y Nicolás Maduro, quien envió una carta expresando su admiración por el Papa. La incertidumbre sobre el futuro papel del Papa, líder espiritual de 1.400 millones de católicos, y las especulaciones sobre una posible renuncia, siguen presentes. El derecho canónico no prevé disposiciones para escenarios que comprometan la lucidez papal, lo que añade otra capa a esta compleja situación.
Las oraciones de fieles de diferentes nacionalidades, desde la comunidad argentina de Roma hasta los vietnamitas frente al hospital Gemelli, reflejan la magnitud del impacto global que tiene la salud del Papa Francisco. La escena en la Plaza de San Pedro evoca recuerdos de la vigilia por Juan Pablo II en 2005, aunque el Cardenal Óscar Rodríguez Maradiaga afirma que "aún no es momento para que él se vaya al cielo".
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