Protestas en Albany por seguro de desempleo en NY

El epicentro de la protesta era el Programa Puente de Desempleo, una iniciativa legislativa que busca ampliar el acceso al seguro de desempleo en Nueva York. En el centro de la controversia se encuentra Julio Pabón, un padre de familia colombiano indocumentado, que ejemplifica la precariedad que viven miles de trabajadores en el estado. Su historia, la de muchos que trabajan incansablemente pero quedan desprotegidos al perder su empleo, fue el catalizador de esta manifestación.
“Perder un trabajo es una situación de vida o muerte para miles de neoyorquinos,” afirmaba Sol Freire Figueroa, directora de campañas laborales de New York Communities for Change. Ella, junto con otros líderes, resaltó la urgencia de aprobar el Programa Puente. Este proyecto busca cubrir a alrededor de 750,000 trabajadores, incluyendo a indocumentados, trabajadores independientes y aquellos recientemente liberados de prisión, ofreciéndoles un pago mensual de $1,200 en caso de desempleo.
La Asambleísta Karines Reyes, presidenta del Grupo de Trabajo Puertorriqueño/Hispano, se unió a la exigencia: “Nuestro sistema de desempleo se queda atrasado… es más importante que nunca que solucionemos este problema.” Su postura refleja la creciente preocupación por la vulnerabilidad de los inmigrantes ante las políticas federales.
El impacto del proyecto va más allá de los trabajadores indocumentados. Jessica Maxwell, directora ejecutiva del Centro de Trabajadores del Centro de Nueva York, destacó la importancia de los trabajadores inmigrantes en sectores como la agricultura, y la necesidad de protegerlos. También, Larry Goldbetter, presidente del Sindicato Nacional de Escritores, enfatizó la situación de los trabajadores autónomos, quienes a menudo enfrentan contratos inestables y pagos irregulares.
Los manifestantes recordaron que el sistema de seguro de desempleo actual, establecido en 1935, no se ha actualizado para reflejar las realidades laborales del siglo XXI, dejando a un lado a un gran segmento de la población trabajadora. La falta de adaptación ha creado una brecha significativa en la protección social, afectando de manera desproporcionada a quienes más lo necesitan.
La protesta en Albany refleja una lucha por la equidad y la inclusión, un llamado a una reforma necesaria en un sistema que, según los manifestantes, deja atrás a quienes sostienen la economía del estado.