Trump planea registro obligatorio para inmigrantes indocumentados en Estados Unidos
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En el centro de la controversia se encuentra un plan anunciado por el gobierno del presidente Donald Trump que impactaría directamente a la población migrante indocumentada. Se trata de una medida que exige la inscripción obligatoria en un registro nacional, incluyendo la toma de huellas dactilares. Esta acción, según fuentes cercanas a la administración Trump, representaría una significativa escalada en la política migratoria del país.
La portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, citó en un comunicado publicado por The New York Times: “El presidente Trump y la secretaria Noem tienen un mensaje claro para quienes están en nuestro país ilegalmente: Márchense ahora”. La declaración continúa con un llamado a la autodeportación, ofreciendo la posibilidad de un futuro retorno bajo ciertas condiciones. “Si se van ahora, podrían tener la oportunidad de regresar y disfrutar de nuestra libertad y vivir el sueño americano”, añadió McLaughlin.
El alcance de esta iniciativa es amplio. No solo los adultos indocumentados estarían obligados a registrarse, sino que también se exige la inscripción de menores de 14 años, responsabilidad que recaería en sus padres. Esta obligación se sustenta en una ley de la Segunda Guerra Mundial, actualmente en desuso, que establecía el registro de inmigrantes indocumentados.
El incumplimiento de esta ordenanza tendría serias consecuencias. Los migrantes que no se registren se enfrentarían a procesos penales, con posibles multas y hasta penas de cárcel. La medida contrasta con el tratamiento actual de la inmigración ilegal, considerada un delito civil.
El éxito del registro parece improbable, considerando la postura pública de Trump sobre las deportaciones masivas de los más de 11 millones de indocumentados que residen en Estados Unidos. La medida se perfila más como una estrategia de presión para incentivar la salida voluntaria del país que como una herramienta de control efectiva.