Trump anuncia compra de Tesla en apoyo a Musk tras caída de acciones

El protagonista de esta historia, Elon Musk, se encuentra en una situación compleja. Su cercanía al presidente Donald Trump, con quien pasó el fin de semana en Mar-a-Lago, incluso compartiendo un viaje en el Air Force One, ha generado expectativas y especulaciones. Pero la realidad es que tres de sus empresas, X, Tesla y SpaceX, están enfrentando serios desafíos.
La caída del 15% en las acciones de Tesla, borrando las ganancias posteriores al día de las elecciones, fue particularmente impactante. Esto le costó a Musk US$29.000 millones en patrimonio neto solo ese día, según el Índice de multimillonarios de Bloomberg. Ante esta situación, Trump ofreció un gesto de apoyo, anunciando en Truth Social su intención de “comprar un Tesla nuevo mañana por la mañana como muestra de confianza y apoyo a Elon Musk, un estadounidense realmente bueno”. Musk agradeció públicamente el apoyo a través de X.
La situación de Tesla se complica aún más por la disminución en las ventas, especialmente en Europa, atribuida por algunos analistas a la competencia y a la injerencia de Musk en la política. Además, los vehículos y las salas de exposición de Tesla han sido blanco de protestas, incluso actos de violencia, como el incendio de una estación de carga en Boston y un ataque a tiros contra un concesionario en Oregon. Musk atribuye estos hechos a “activistas liberales”.
Mientras tanto, X sufrió fallas generalizadas atribuidas por Musk a un “ciberataque masivo”. Sin embargo, un experto en ciberseguridad, Eric Noonan, CEO de CyberSheath, señaló la cautela necesaria ante este tipo de afirmaciones en el corto plazo. La plataforma, adquirida por Musk por US$44.000 millones, ha experimentado una drástica reducción en su valor desde entonces, según estimaciones de Fidelity.
Por si fuera poco, SpaceX continúa lidiando con las consecuencias de las explosiones de sus cohetes Starship, con la Autoridad Federal de Aviación investigando los incidentes. Musk, en una postura de aparente optimismo, calificó los fallos como “un pequeño revés”.
La situación actual de las empresas de Musk revela la complejidad de navegar el mundo de los negocios, incluso para figuras con una gran influencia política. El futuro de estas empresas dependerá de cómo se gestionen estos desafíos.