SpellRing: Anillo traduce lenguaje de señas en tiempo real

No se trata de un simple gadget; es un anillo inteligente, del tamaño de una moneda de 25 centavos, capaz de traducir el lenguaje de señas americano (ASL) a texto en tiempo real. Detrás de SpellRing se encuentra el trabajo de Hyunchul Lim, estudiante de doctorado en ciencias de la información, junto con el equipo del Laboratorio de Interfaces de Computadoras Inteligentes para Interacciones Futuras (SciFi). El proyecto, basado en una versión previa llamada Ring-a-Pose, ha dado un paso significativo incorporando microsonar e inteligencia artificial. Esto permite un análisis continuo y preciso de los sutiles movimientos de los dedos que conforman la ortografía dactilológica del ASL.
¿Cómo funciona? El anillo, impreso en 3D y colocado en el pulgar, utiliza un micrófono y un altavoz que emiten y reciben ondas sonoras inaudibles. Estas ondas, junto con los datos de un minigiroscopio que mide el desplazamiento de la mano, alimentan un algoritmo de aprendizaje profundo. Este algoritmo es el cerebro de SpellRing, capaz de interpretar los movimientos y convertirlos en texto digital.
Las pruebas con 20 usuarios de ASL, entre principiantes y expertos, deletreando más de 20.000 palabras, han arrojado resultados impresionantes. Se ha logrado una precisión de entre 82% y 92%, una cifra comparable a sistemas mucho más grandes y costosos. “Hemos acortado parte de la brecha entre la comunidad técnica y la comunidad objetivo”, afirma Cheng Zhang, profesor adjunto en Cornell y coautor del estudio.
Pero el equipo no se detiene ahí. El futuro de SpellRing implica la integración con gafas de IA, capaces de captar los movimientos del cuerpo y las expresiones faciales, elementos cruciales del ASL que van más allá del deletreo manual. “Las personas sordas y con dificultades auditivas usan más que sus manos para el ASL. Utilizan expresiones faciales, movimientos del torso y gestos con la cabeza”, explica Lim.
Esta innovación destaca el potencial de la inteligencia artificial para fomentar la inclusión y la accesibilidad. No es solo un avance tecnológico; es un paso hacia una comunicación más universal e inclusiva, abriendo puertas a nuevas formas de interacción humana.