Texas: Leyes sobre religión en escuelas públicas generan polémica

En el centro de la polémica: dos proyectos de ley, el SB 10 y el SB 11, presentados por los senadores republicanos Mayes Middleton (Galveston) y Phil King (Weatherford). El primero buscaba la inclusión de los Diez Mandamientos en las aulas de las escuelas públicas texanas, mientras que el segundo permitiría dedicar tiempo a la oración durante el horario escolar.
La votación del SB 10, que se llevó a cabo el miércoles por la noche, finalizó con un resultado de 20 votos a favor y 11 en contra, siguiendo líneas principalmente partidistas. Tres senadores demócratas se unieron a los republicanos en la aprobación. La aprobación del SB 11 un día antes, con un marcador de 23 a 7, presagiaba lo que ocurriría.
“La mayoría de los tejanos son religiosos, pero me atrevería a decir que los tejanos no quieren que el gobierno les imponga la religión. Ni siquiera quieren que el gobierno les imponga su propia religión,” argumentó la senadora demócrata Sarah Eckhardt (Austin), reflejando las preocupaciones de la oposición.
La oposición no se limitó a argumentos políticos. Una carta firmada por 166 líderes religiosos de diversas comunidades (sij, bautista, judía y budista), leída por el senador demócrata Nathan Johnson (Dallas), instaba al rechazo de las propuestas, argumentando que “no necesitamos —y de hecho no deberíamos— convertir las escuelas públicas en escuelas dominicales.”
Los defensores de los proyectos de ley, por su parte, se ampararon en la idea de un regreso a valores morales tradicionales. Se mencionaron sentencias judiciales recientes, como el caso Kennedy contra el Distrito Escolar de Bremerton, como un precedente que avalaría su iniciativa. El senador Middleton, en un comunicado, señaló que “Nuestras escuelas no son zonas libres de Dios. Somos un estado y una nación basados en el principio 'En Dios Confiamos'.”, añadiendo agradecimientos al expresidente Donald Trump por apoyar la iniciativa.
La discusión involucró a figuras como David Barton y su hijo Timothy Barton, quienes testificaron a favor de las leyes, argumentando que los Diez Mandamientos son la base de la moral y el derecho estadounidenses. Las posturas de ambos fueron confrontadas por otras perspectivas religiosas, incluso por algunos cristianos, quienes resaltaron la importancia de la separación entre la Iglesia y el Estado.
Ambos proyectos de ley, considerados prioritarios por el vicegobernador Dan Patrick, avanzan ahora a la Cámara de Representantes para su consideración final. El debate, sin embargo, seguirá vigente, reflejando la complejidad de las interacciones entre fe, educación y política en el contexto texano actual. Las implicaciones de estas leyes se extenderán más allá de los muros escolares, resonando en el debate social y político por años.