Lágrimas, detenciones e incertidumbre tras redadas en Estados Unidos

"Algunas mujeres comenzaron a llorar porque sus hijos estaban en la escuela o la guardería. Fue muy triste verlo", relató un trabajador de 24 años que prefirió mantener su identidad en reserva. El guatemalteco, residente legal en EU, logró demostrar su estatus migratorio, pero su pareja —quien carecía de documentos— fue llevada por las autoridades. Hasta el cierre de esta edición, desconocía su paradero.
Detrás de la redada masiva hay más preguntas que respuestas. Lenny Schmidt, copropietario de la empresa familiar, aseguró que todos sus empleados contaban con documentación verificada y calificó el operativo como "aterrador". Las cifras preliminares indican que entre 50 y 60 personas, en su mayoría originarias de Guatemala, permanecían detenidas hasta el viernes.
El operativo coincidió con otra redada masiva en una planta de Hyundai en Georgia, donde detuvieron a 475 personas, principalmente coreanos. Para el trabajador guatemalteco, el mensaje es claro: "Venimos a trabajar, no somos criminales". Mientras espera noticias de su pareja, sabe que el lunes debe regresar a su turno. Los campos de maíz y frijol que dejó atrás en su país siguen dependiendo de su salario.