La calle Plutarco Elías Calles, a la altura de Laredo en la colonia Tampiquito, se vistió de un manto de tierra y lodo, producto del azolve que tapó una alcantarilla.
La situación, lejos de ser un simple inconveniente, provocó un cierre momentáneo de la vialidad. Las cuadrillas de Servicios Públicos del municipio se movilizaron rápidamente para limpiar la zona y reabrir la circulación, que se tornó complicada durante la hora pico.
Mientras tanto, en Monterrey, los habitantes de la colonia San Martín viven una situación que no tiene nada de poética. La instalación de drenaje pluvial en la calle Manuel Belgrano parece estar en un limbo, y la zanja que quedó abierta tras las obras se convirtió en un foco de problemas.
La lluvia ha convertido la zanja en un lago, desbordándose y filtrándose hasta el interior de las casas, lo que genera un severo problema para los vecinos. A esto se suma la aparición de grietas en las banquetas, producto de las obras, lo que preocupa a los residentes que temen por la integridad de sus viviendas. Para completar el cuadro, la tubería de agua potable que se encuentra dentro de la zanja sufrió daños, provocando fugas del vital líquido.
Los afectados claman por una pronta solución a la problemática, exigiendo a las autoridades que reanuden las labores para finalizar las obras y evitar que la situación se agrave.