Claudia Sheinbaum, con una visión innovadora, ha puesto en marcha un plan de salud que busca llegar a los rincones más apartados del país, llevando la atención médica directamente a los hogares de los 13.6 millones de adultos mayores y personas con discapacidad que reciben pensiones del gobierno federal.
El primer paso de este plan, que arrancará en los próximos tres meses, es un censo exhaustivo de la población objetivo. Un ejército de 20,000 servidores de la nación, con la vitalidad y la energía de la juventud, saldrá casa por casa a recopilar información detallada sobre la salud y el estilo de vida de cada beneficiario.
Este censo no se limitará a un simple conteo. Se utilizará un cuestionario de 80 preguntas para obtener una visión completa de las necesidades de cada persona, incluyendo aspectos médicos y sociales. La información recopilada será crucial para diseñar un esquema de atención médica personalizada, que se ajuste a las necesidades de cada individuo.
Con la colaboración de la Secretaría de Salud y el IMSS, se establecerán visitas a los hogares cada dos meses. Cada beneficiario recibirá una cartilla de seguimiento para monitorear sus atenciones médicas y tratamientos. Este plan contempla la contratación de 21,500 enfermeras y médicos, quienes serán el rostro de este nuevo modelo de atención.
Las visitas médicas, que comenzarán en febrero, no solo se centrarán en el tratamiento de enfermedades, sino que también enfatizarán la medicina preventiva y la atención primaria. Las enfermeras desempeñarán un papel fundamental en la observación de otros factores que influyen en la salud, como la alimentación y el bienestar emocional de los pacientes.
La implementación del programa "Salud en casa" en todo México presenta tanto oportunidades como retos.
- Logística y seguridad: La escala nacional introduce dificultades logísticas y de seguridad, con una enfermera asignada a cada 632 personas, cada profesional de la salud deberá atender a un promedio de 10,5 pacientes al día para cumplir con el objetivo de visitas bimensuales.
- Riesgos en áreas de conflicto: Los problemas de violencia en ciertas regiones del país podrían complicar la contratación de personal médico dispuesto a trabajar en áreas de alto riesgo.
Este plan, con su enfoque integral, busca no solo mejorar el acceso a la atención médica, sino que también refleja un compromiso con la inclusión y el bienestar de los grupos más vulnerables de la sociedad mexicana.