Aunque el instituto cerrará este año con un total de 340,000 créditos, incluyendo aquellos para adquisición, construcción, reparación y terrenos, el enfoque para los siguientes seis años estará en la construcción de 500,000 nuevas viviendas. Estas serán de interés social y bajo costo, un sector que los desarrolladores privados han dejado de lado, pero que representa una necesidad crucial en el país.
Para lograr este objetivo, el Infonavit invertirá 288,000 millones de pesos en el primer año, una inversión que se traducirá en viviendas dignas para familias mexicanas. Además, se otorgarán 250,000 créditos para el mejoramiento de viviendas, con una inversión de 20,000 millones de pesos. Esto se suma al millón de créditos ya otorgados en el sexenio pasado, es decir, el Infonavit tiene como objetivo aumentar la cantidad de créditos en un 25%.
Pero la innovación del Infonavit no se detiene ahí. Se creará una empresa constructora propia con el objetivo de disminuir los costos y asegurar la disponibilidad de viviendas, incluyendo las 500,000 nuevas viviendas del Infonavit, así como las 500,000 que se estiman para Conavi y Fovissste.
El plan también incluye un programa de vivienda en renta con opción a compra, dirigido principalmente a mujeres jefas de familia, jóvenes, adultos mayores y trabajadores independientes. Este programa permitirá a quienes no puedan adquirir una vivienda de manera tradicional, acceder a una opción de renta con la posibilidad de convertirla en propiedad a futuro.
El Infonavit se asegurará de que la información sobre estos programas llegue a todos los derechohabientes a través de sus delegaciones estatales, centros de servicio y plataforma digital, así como mediante campañas informativas.
La clave para el éxito de este plan reside en la construcción de una empresa constructora propia, la cual permitirá al Infonavit controlar mejor los costos y asegurar la disponibilidad de viviendas de bajo costo, atendiendo una necesidad urgente de la población mexicana.