Un misterio envuelve a una residencia en la calle Tres Picos, entre Hegel y Lamartine.
La alerta se activó cuando una mujer, identificada como familiar de una de las víctimas, acudió a la vivienda después de varios días sin poder contactar a su hermano. La angustia de la incertidumbre se convirtió en horror al descubrir una escena dantesca. Dentro del garaje, en el interior de una camioneta de lujo, yacía el cuerpo sin vida de Enrique “N”, de 72 años.
“Intenté hablarle, pero… no respondía,” recuerda la hermana, todavía conmocionada por el impacto de la situación. Al percatarse de la gravedad, de inmediato solicitó ayuda policial y médica. A pesar de los esfuerzos de los paramédicos, ya era demasiado tarde. Enrique “N” había fallecido a causa de las heridas sufridas.
Pero la tragedia no terminaba ahí. Con la llegada de las autoridades y peritos, se realizó una inspección minuciosa del vehículo. En la cajuela, se encontró un segundo cuerpo: el de Alejandro “N”, de 49 años.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) acordonó la zona mientras los servicios periciales trabajaban en la escena del crimen. Las investigaciones preliminares sugieren que el móvil del doble homicidio no fue el robo, ya que aparentemente no faltaba ninguna pertenencia, ni del vehículo ni del interior de la casa. Esta información añade una capa de misterio al caso.
La Fiscalía Capitalina ha abierto una carpeta de investigación por homicidio doloso. Las autoridades están analizando las cámaras de seguridad de la zona y del inmueble en busca de pistas que permitan identificar a los responsables. La búsqueda de justicia ha comenzado.
Mientras tanto, la familia de las víctimas se enfrenta a la pérdida y la incertidumbre, esperando que las investigaciones arrojen luz sobre este suceso que ha conmocionado a la colonia Polanco y a la ciudad entera. El análisis de las grabaciones de seguridad y las autopsias serán claves para esclarecer los hechos.